Sábado 21 de Diciembre de 2024

BRACAMONTE DIJO: «HAY MUCHAS MUJERES, ME DAN BRONCA, LAS QUIERO MATAR A TODAS», LO CONDENARON A 14 AÑOS

Publicado: 12-07-2013

 

50831_195005_650x420

Este viernes se conoció el dicatamen del Tribunal Oral en lo Criminal primero de la ciudad contra  Simón Bracamonte  por prender fuego con alcohol a su esposa embarazada en su casa del barrio porteño de Flores, causarle graves heridas e intentar evitar el acceso de un médico para que la atendiera.

“Hay muchas mujeres, me dan bronca, las quiero matar a todas”, había afirmado el autor del delito durante una de las audiencias advirtió la presencia de integrantes de diferentes organismos que ayudaron a su pareja.

Además de estar preso por varios robos con armas, Bracamonte  en una ocasión fue llevado al Hospital Piñero tras un asalto y mientras estaba allí, prendió fuego la sala en la que se encontraba y golpeó a pacientes y médicos.

Los jueces Martín Vázquez Acuña, Alberto Huarte Petit y Roberto Salas hicieron lugar casi totalmente al pedido de la fiscal Mónica Cuñarro y la querella, que habían solicitado que el hecho sea enmarcado en este delito y castigado con 15 años de cárcel.  

“Gracias, no voy a tener más pesadillas de que lo dejen libre y me venga a matar”, dijo llorando B., la víctima, al presenciar esta tarde la lectura de la sentencia en el Palacio de Tribunales.

El hecho que se ventiló en el juicio ocurrió el 23 de julio de 2012 a las 10.30 en Balbastro al 2700 del Bajo Flores, cuando Bracamonte, que estaba en libertad condicional por varias causas de robo, citó a su casa a su esposa, que iba a concurrir a la ginecóloga porque estaba embarazada de un mes. 

“Ahora vas a ver, vas a aprender a hacerme caso”, le dijo el imputado a la mujer, de acuerdo al expediente, tras lo cual la obligó a desnudarse, la roció con alcohol y finalmente la prendió fuego en la cara, la espalda y los hombros.

Los jueces consideraron probado que para provocarle más dolor, le tiró una manta de nylon, lo que empeoró las heridas, y cuando un vecino tocó el timbre, Bracamonte salió y dijo que era una simple discusión de pareja, momento en el que la joven aprovechó para llamar al SAME.

La mujer declaró que logró llegar a la ducha, envolverse en una sábana y mientras gritaba escapó del departamento hacia el de una vecina que le abrió, le puso cubitos de hielo en el cuerpo y volvió a llamar a la ambulancia.

Afirmó, además, que Bracamonte quería tirar abajo la puerta y amenazó de muerte a la vecina, por lo que hoy también se lo condenó por “amenazas coactivas”.

Cuando los médicos llegaron, el ahora condenado los interceptó en la puerta del edificio e intentó convencerlos de que se trataba de una falsa alarma y así evitar que pudieran auxiliar a su esposa, pero finalmente pudo ser llevada al hospital de Quemados.

B. perdió su embarazo y estuvo bajo tratamiento psicológico por pesadillas e insomnio, ya que temía que liberaran a su ex marido. Los mismos síntomas sufrió la vecina que la ayudó.

Por su parte, la jueza Argibay afirmó que “Es imprescindible que todos los que somos operadores del sistema generemos campañas de concientización sobre el tema de violencia de género. Porque aún sigue existiendo machismo judicial en el que son discriminadas las mujeres, en particular aquellas de menores recursos. Por eso debemos pedirles a los jueces y fiscales varones que nos acompañen en el avance y respeto de los derechos de los más vulnerables”.