Francia: el candidato europeísta Macron ganó las elecciones presidenciales

El europeísta Emmanuel Macron es el nuevo presidente de Francia, según los datos provisionales del recuento, que con el 90% escrutado otorgan al centrista el 64,84% de los sufragios en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas este domingo. 

Su contrincante, la ultraderechista Marine Le Pen, ya ha admitido la derrota. Más de 47 millones de franceses han sido llamados este domingo a las urnas para participar en unas elecciones con efecto en toda Europa.

«Voy a defender a Francia, voy a defender a Europa», ha dicho el virtual presidente de la República

Le corresponde a Macron una misión patriarcal. Podía haberle desbordado el miedo escénico, pero el sucesor de Hollande dijo ante la multitud: «Os protegeré y os serviré. Y lo haré en cumplimiento de nuestro lema: libertad, igualdad fraternidad». Fue entonces cuando Macron se concedió los momentos de mayor emoción particulares y cuando sus compatriotas prorrumpieron en la escena coral de «La Marsellesa».

Parecía que los franceses habían vuelto a ganar el mundial de fútbol. Tan numerosa y tan entusiasta fue la celebración de la victoria de Macron que la política, degradada a un espacio sospechoso de nuestras sociedades, recuperó en París y en la deslumbrante escenografía del Louvre una dimensión optimista y hasta lúdica.

Mérito del movimiento que ha engendrado en apenas un año el nuevo presidente de Francia. Se llama En Marche!, pero bien podría llamarse Colores Unidos de Macron, pues la fiesta multitudinaria del 7-M parecía un anuncio de Benetton en la promiscuidad de edades, etnias, razas, categorías sociales y generaciones congregadas.

Macron se definió como «presidente de todos los franceses» y como expresión catalizadora de «un país unido» en el que promete todas las atenciones a «los votantes indignados y encolerizados de Marine Le Pen, precisamente para que nunca tengan que aferrarse a los extremos».