Camino a una transición ordenada
Publicado: 04-10-2016
El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, el diputado de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, autor del proyecto, y la legisladora Cecilia De La Torre, repasaron los puntos salientes de la sanción de la Ley de Transición Republicana, que contó con el apoyo de la bancada del oficialismo en la Legislatura, del PRO.
La nueva norma busca fortalecer las instituciones mediante el establecimiento de pautas de acción concretas que, expresan sus autores, incrementarán la transparencia y la circulación de información, con el fin de lograr una transición ordenada y eficaz durante un cambio de gestión, evitando que se generen acciones tendientes a obstaculizar o perturbar el normal desarrollo de los actos de gobierno.
Muchos han sido los comentarios acerca del estupor con el que el Presidente Mauricio Macri y sus colaboradores recibieron el gobierno y se encontraron con poca información y la menor colaboración de parte de los funcionarios heredados de la gestión anterior. Sin embargo, a la hora de realizar auditorías del gobierno anterior, hubo también hallazgos de información ocultada y numerosas irregularidades que imposibilitaron el rápido accionar de las nuevas autoridades para avanzar con resoluciones en los ministerios o con decisiones administrativas que involucraban recursos.
En la ciudad, a partir de ahora, se establece que se creará un equipo de transición en el ámbito de la Jefatura de Gabinete, conformado por el jefe de Gabinete, el Síndico General de la Ciudad y representantes del gobierno saliente y entrante.
Además, obliga a las autoridades salientes a asistir a reuniones de transición, realizar informes de interés de las autoridades entrantes y suministrar toda la información pertinente sobre el estado de la administración central. Para estas reuniones se deberá crear un grupo de representantes y, en caso que no lo haga, la ley prevé una conformación automática.
También define el período de transición que se inicia a las cero hora del día siguiente de emitida el acta de proclamación de autoridades por la autoridad electoral competente y finaliza con la jura de asunción de las autoridades entrantes. Y,para que no pueda ocurrir en la Ciudad de Buenos Aires, lo que sucedió en el traspaso de asunción de mando presidencial donde Cristina faltó a la ceremonia y debió ser reemplazado por el entonces Presidente Provisional del Senado a cargo del Poder Ejecutivo, Federico Pinedo que colocó la banda y entregó el bastón de mando a Maurico Macri. Uno de los apartados de la ley sancionada obliga al jefe de Gobierno de la Ciudad a cumplir con los actos simbólicos y protocolares de entrega de mando, de conformidad con los usos, costumbres y/o reglamentos vigentes.
Ferraro, el autor de la ley, sostuvo que la norma “contribuye a la calidad institucional y al principio republicano que esta Ciudad defiende y, a su vez, se inscribe en un paquete de leyes, que esperamos a corto plazo estemos votando, como la ley de acceso a la información y la modificación a la ley de ética pública. Y debemos analizar nuestro código electoral e implementar e debate público obligatorio de los candidatos a Jefes de Gobierno de la Ciudad».